Pero la antigua, la de Charlton Heston, la de la Estatua de la Libertad, la reaccionaria, la que nos hizo soñar que algún día existiría un mundo en paz, desgraciadamente después tuvimos al protagonista como exponente máximo de la asociación del rifle.
Bueno, esta es una de esas películas que recuerdo haber visto en Sábado Cine y también recuerdo haber hablado con amigos de ella antes de que la pusieran. Alguien me dijo en el autobús yendo para el cole: Quillo esta noche ponen el planeta de los "signis" y yo, que no sabía que era aquello convencí a mis padres para que me dejaran verla. Esta historia me causó mucho desasosiego, cuando eres niño crees que muchas cosas pueden hacerse realidad y por unos días pensé que el mundo podría ser como en la peli. Cuando te haces mayor, y la vuelves a ver ( es de las que no cansa nada volver a revisarla una y otra vez ) entiendes la metáfora del asunto, la gran crítica al militarismo, a nuestra sociedad como la entendemos.
Hoy, la estética del film, la simplicidad del planteamiento, la belleza perturbadora de la compañera de Heston, la animalidad de los hombres y la humanidad de los simios y la arriegada pero audaz resolución del film, me parecen inigualables, una de las cotas más altas que el cine haya podido dar.
Una recomendación, si pueden, busquen Soylent Green, también de Scifi, también de Heston, también con mensaje y desasosegante.
Que les aproveche.