Nuestro amigo Alfonso lo preguntaba en su blog y me he quedado reflexionando un poco sobre esto. ¿Tiene sentido mostrar a los demás nuestra orientación sexual? ¿qué interés puede tener la gente en ello? Una de las opciones que se me ocurren es que así quedan señalados los diferentes si hablamos desde el punto de vista de la población hetero. O sea, que parece que diera tranquilidad tener encasilladas a las personas en diferentes compartimentos estancos. En el fondo, hacer que alguien se diderencie públicamente de los demás es una forma de discriminación, o al menos yo así lo veo.
Me llama también poderosamente la atención como una parte significativa de las personas que "han salido del armario" animan a otras a hacerlo, creyendo que así se dignifican, por que se hacen "visibles".
No creo que la solución a la cruel represión que han tenido y aún tienen personas con una determinada orientación sexual sea dar a conocer a los demás qué y con quién quieren estar. Lo mejor es no salir del armario porque no sea necesario entrar.
La foto es de RCanine.