miércoles
El principito
A mis manos siempre llegan catálogos de juguetes infantiles. Catálogos donde vienen muñecas, carritos de muñecas, pelotas, coches teledirigidos, libros...Entre estos, siempre hay para los más pequeños. El otro día viendo los títulos de algunos de ellos, me maravillé del descubrimiento que hice: son libros para niños y para adultos.
Sí. Para adultos.
-"1, 2, 3": Es bueno empezar a contar hasta tres para no cabrearte como siempre.
-"Aprende a ir al baño": y bajar la tapa del mismo cuando se termine. O no salpiques. O no escurras el agua sobrante de lavarte las manos en el espejo. (Por no poner más)
- "Formas, sonidos y colores": No hagas ruido al comer. El pantalón ha pasado del color beig a marrón oscuro porque lo tienes que poner a lavar tú, no yo. No son formas de hablar con la boca llena. El color rojo del semáforo es para que te pares, no para acelerar más. El claxon del coche no es un alargamiento de tu garganta, no hace falta que lo toques para todo...
- "Qué bonita es la magia": sí, pero no sirve para que los platos sucios se limpien solos. Ni para que la ropa se planche sola. Ni para que tu pareja haga todo lo de la casa, trabaje fuera y encima esté divina de la muerte.
- "Jugando con mis amigos": pero no siempre al fútbol. Ni sólo con amiguitas. Ni a los médicos (con las amiguitas). Se puede jugar con los hijos.
- "Experimentos divertidos": poner la lavadora tú solito. Cocinar algo que no esté precocinado. Poner la mesa. Quitar la mesa. Sonreír...
Dedicado a todos los "principitos" que pululan por ahí. Para que su reino de tiranía desaparezca.
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