Le prometí hace tiempo a mi amigo QQ que le enseñaría a nuestro amigo Yogi. Pero me salió rumboso (el Yogi, no QQ) y se me fue por ahí con el monopatín a recorrer el mundo.
Me encontré al Yogi en el rastro de Jerez y lo traje a casa. Lo que no me dijo es que le gustaba ir por ahí...sin mí. Eso no se hace Yogi. No. Pero eres tan mono que te perdono.
Ea, QQ...Te lo debía. Esto y el cuadro de payaso. Pero próximamente, próximamente...
2 comentarios:
Muchas gracias, Agata!
Sin duda es un hermoso ejemplar de Orsus Yoguium Vulgaris, es normal que se te escape en monopatín por ahí, es una especie conocida por sus costumbres anárquicas... Lo raro es que no te haya sableado la nevera todavía.
Estoy pensando que lo mismo este lindo oso podría interpretar un papel de indigente en Perroniño...
PD: Espero impaciente el cuadro del payachu...
Payachuuuu...
¡Payachuuuuuuuuu!...
¡Payachuuuuuuuuuuuu!!!!
JUJOJAJiJU
Cuando necesites a Yogi...ya sabes...silba que él va.
El payachuuu....estará listo en breve...
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