jueves

Wilt


Vamos a reivindicar el humor inglés, el de Tom Sharpe. La primera vez que leí "Wilt" me llevé una tremenda sorpresa, nunca había tenido en mis manos nada similar. Tom Sharpe gusta de colocar a antihéroes en situaciones estrafalarias, ridículas y de esta manera reírse de sí mismo. Porque el protagonista de esta novela podría ser cualquiera de nosotros, Wilt, un profesor de formación profesional gris, con una vida gris, y pareja hundida en la monotonía. Es precisamente esto lo que le hace más cercano porque Wilt no está a gusto con su vida, pero tampoco hace nada por mejorarla.
Las circunstancias y el azar harán que se vea arrastrado a lugares habitados por personajes muy distantes a los suyos. Ese es el humor de Sharpe, usar un contexto inesperado para provocar la carcajada y con Wilt se ríe uno a mandíbula batiente. Aunque después nos produzca lástima.
Los diálogos son cortos, rápidos y directos. Previsiblemente, no abundan descripciones y son otros personajes secundarios los que delimitan el perfil de Wilt.
Humor inglés clásico: pose por fuera, ridículo por dentro. Apariencia formal, realidad informal. Puritanismo envolviendo perversión.
La saga continuó con varios títulos más y el mismo personaje, fue tanto su éxito que incluso el primero de ellos, al que dedicamos esta entrada, se llevó al cine hace unos años.
Mejor leer el libro.