jueves

¿Será posible?


Perdonad que os hable de economía otra vez, pero es que esto no hay últimamente quien lo entienda. Resulta que el presidente del banco europeo, un tal Jean Claude Trichet, soltó hace unos días que pensaban subir los intereses del dinero en los próximos meses. ¿Consecuencia? ese mismo día sube el euribor tres décimas, que así dicho parece poco, pero que son cientos de euros en una hipoteca tipo. ¡Ojo! que no era que hubiese subido el precio del dinero, sino que se refería a que a lo peor tenían que subirlo. Y sólo por eso el dinero se pone más caro.
Digo yo, que podría haberse metido la lengua en un sitio más seguro y haberse callado la boquita, porque seguro que cuando lo suban de verdad, el dinero se volverá a encarecer.
Cada vez tiene uno más la sensación de que esto es un teatro de marionetas en el que unos pocos manejan el hilo y los demás nos movemos al ritmo que quieren marcar.
En la foto, el lumbreras.

4 comentarios:

Alfonso Saborido dijo...

Es que el lumbreras habla queriendo para provocar eso. Igual que ayer uno dijo que el petróleo subirá a no sé cuantos euros. Provoca la subida y la especulación.
En fin.
Volviendo a la foto, detrás de eso está la ensenada de Bolonia ¿no? Tengo un libro sobre fotografías aéreas de la costa de Cádiz y Huelva; como hay huelga de transportes, te lo puedo llevar en burro. Si te interesa claro. :P

CriS dijo...

Hola pues si pues si... ayer el consejero delegado de mi empresa estuvo en una reunión con x directivos del sector financiero español y bueno... vino temblando y casi blanco... entre otras cosas decía que si, que vayamos preparando la soga para el mes que viene ahorcarnos de nuestras hipotecas... está realmente malito el tema... y no tiene ninguna pinta de curarse solo esto...

Unknown dijo...

seguro que a él no le cuesta trabajo pagar su hipoteca. Es más,de hecho, no creo que tenga una siquiera...

Anónimo dijo...

Lo de las hipotecas es un problemilla. Los que sufren de verdad las decisiones de lumbreras como este, viven en el tercer mundo. En las fórmulas matemáticas que rigen la economía siempre se olvidan de incluir la variable del sufrimiento humano infligido. ¡Con lo que duele el hambre!. Mucho más que meter los premios nóbeles de economía por el mismo sitio por dónde se deberían guardar las lenguas los presidentes de los bancos del avaricioso "primer" mundo.
¿Existirá un infierno jerárquico y piramidal cómo el de Dante?